La semana mundial de concientización sobre el uso de los antibióticos se celebra todos los años durante la tercera semana de noviembre con el lema “Antimicrobianos: manéjalos con cuidado”. El tema elegido este año es: Unidos para preservar los antimicrobianos.
Durante esta semana el objetivo es aumentar la concientización mundial sobre la resistencia a los antibióticos y fomentar mejor su uso entre la población, los trabajadores de la salud y los responsables de la formulación de políticas para evitar que la resistencia a los antibióticos siga apareciendo y propagándose.
Los antibióticos son medicamentos utilizados para prevenir y tratar las infecciones bacterianas. La resistencia a los antibióticos se produce cuando las bacterias mutan en respuesta al uso de estos fármacos; y al generar resistencia a los antibióticos hace que las enfermedades empeoren, que se prolonguen las estancias hospitalarias y aumente la mortalidad, elevando los costos médicos y afectando seriamente la vida y la salud.
Staphylococcus aureus, Streptococcus pneumoniae, Escherichia coli, Klebsiella pneumoniae y Salmonella spp son algunas de las bacterias que en la actualidad más han demostrado ser resistentes a diversas generaciones de antibióticos y que ponen en riesgo la salud de la población.
La resistencia a los antibióticos es la capacidad de las bacterias para sobrevivir al tratamiento con antibióticos.
Para prevenirla, lo más importante es hacer un buen uso de estos medicamentos. Pero también, resulta fundamental prevenir infecciones.
¿Cómo se previene?
No Automedicándonos, sino al contrario, en el momento de presentar algún tipo de infección o fiebre consultar a un médico para que indique el tratamiento adecuado para los síntomas, que no siempre es un antibiótico.
Siguiendo las indicaciones del médico y el tratamiento indicado.
Procurar comprar el principio activo adecuado en la dosis adecuada.
No utilizar los antibióticos que le hayan quedado a otros.
Evitando infecciones intrahospitalarias.
A través del saneamiento y promoción de la higiene:
- El lavado de manos evita que las infecciones se propaguen. ¡Menos infecciones, menos antibióticos, menos resistencia!
- Una buena higiene bucal evita que las infecciones se propaguen. ¡Menos infecciones, menos antibióticos, menos resistencia!
Mediante el uso de vacunas eficaces. Las vacunas son el mejor sistema de prevención que existe y en la medida en que disminuyamos el rango de incidencia de los virus, lograremos que estos sean erradicados.
Administrando adecuadamente y bajo supervisión veterinaria, antibióticos en animales de producción de alimentos y mascotas. Aunque este punto no siempre depende de nosotros, inyectar bajas dosis de antibióticos a los animales de consumo también genera resistencia en los microorganismos. Debemos procurar comer carne lo más natural posible y no tratada con antibióticos.
En resumen:
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