Este mes hablaremos sobre los peligros de fumar y el riesgo para la salud.
El consumo de tabaco es la principal causa PREVENIBLE de muerte en todo el mundo, provocando la muerte de más de 7 millones de personas cada año. En Chile es responsable al menos de 2 de cada 3 muertes por año.
En nuestro país un 32.5% de la población es fumadora actualmente (cifra más baja que en 39,8% en 2010); de ellos un 36,7% es hombre y 28,5% mujer. Además, según la Encuesta Nacional de Salud de consumo de tabaco 2016-2017 la mayoría de los fumadores chilenos consumen 7 cigarros por día.
Por día se calcula en Chile que mueren 54 personas a causa del consumo de cigarrillo, lo que implica un 18,3% del total de las muertes son atribuibles al tabaquismo.
Pero cerca de 20 mil más mueren anualmente por patologías relacionadas con el consumo de tabaco.
¿Qué contiene un cigarrillo?
El tabaco contiene nicotina, una droga tan adictiva como la heroína y la cocaína, es por esto su alto poder adictivo, adicionalmente, el humo expedido por su consumo contiene más de 4000 productos químicos, de los cuales se sabe que al menos 250 son nocivos, y más de 50 causan cáncer.
El daño provocado por estas sustancias no sólo ocurre en los lugares que tienen un contacto directo con el humo de tabaco, como la boca y pulmones, sino también en lugares tan distantes tales como el corazón, vasos sanguíneos, vejiga y riñones.
Efectos a corto y largo plazo por el tabaquismo
El efecto nocivo del tabaco es acumulativo, lo que se debe considerar incluso si la dosis es de un cigarrillo diario. En la otra cara de la moneda, los beneficios de suspender este hábito también son progresivos y se reflejan desde el primer día hasta que a los diez años el riesgo de sufrir cáncer pulmonar se reduce en un 50%.
¿Por qué dejar de fumar?
Mejora la respiración y la condición física.
Disminuye la predisposición a contraer infecciones.
La piel y el rostro se recuperan del envejecimiento prematuro.
Recupera el sentido de gusto y olfato.
El hábito de fumar es causa de múltiples enfermedades al tiempo que deteriora la vida de quienes lo tienen y de su entorno. Dejar de fumar es imprescindible.
Las personas que dejan de fumar después de haber sufrido un ataque cardíaco tienen una probabilidad un 50% inferior de sufrir otro ataque cardiaco.
Dejar de fumar disminuye la probabilidad de: sufrir impotencia sexual, tener dificultades para quedarse embarazada, tener partos prematuros, hijos con insuficiencia de peso al nacer o abortos; y disminuye el riesgo adicional de muchas enfermedades relacionadas con el tabaquismo pasivo en los niños, tales como las enfermedades respiratorias como el asma y otras como las otitis.
¿Y cómo dejar de fumar?
Dejar de fumar es un proceso de varias etapas:
Realiza un plan de acción para dejar el tabaco.
Fija una fecha para dejarlo en los próximos 15 días.
Enumera los cigarrillos que fumas durante día.
Elimina cajetillas, encendedores y ceniceros.
Recuerda que los síntomas de abstinencia son pasajeros.
Si presentas una recaída, tranquilízate; la mayoría de los exfumadores ha recaído alguna vez. ¡Recaer no implica fracasar! El mayor peligro es no intentarlo nunca.
Los cigarrillos electrónicos no se aconsejan como método para dejar de fumar, pues al igual que los cigarrillos convencionales contiene niveles de nicotina y de otros compuestos tóxicos para la salud, sus efectos a corto plazo incluyen intoxicaciones y daños pulmonares, mientras que a largo plazo aún son inciertos, se desconoce su eficacia como método para dejar el cigarrillo.
Ahora podemos usar la tecnología a nuestro favor, en las plataformas digitales de Android y Apple store encontramos APPS para dejar de fumar, estas son las mejor calificadas y con mayor utilidad