El diagnóstico de cáncer trae un gran impacto para las personas, es común que se genere estrés, ansiedad, depresión y miedo a lo que significa la enfermedad ya que la mayoría de las personas suele atribuirle un significado de muerte.
En el caso del cáncer de próstata, existen variados estudios que demuestran que su diagnóstico produce grandes problemas psicosociales que afectan tanto a la familia como a la persona a nivel físico y psicológico.
El tener que enfrentarse a distintas posibilidades de tratamientos y los efectos que tendrán en su calidad de vida genera estrés en una gran medida, dejando a los pacientes muy vulnerables a sufrir desajustes emocionales durante la enfermedad.
Algunos de los efectos del tratamiento de cáncer de próstata son: disfunción eréctil, incontinencia urinaria e intestinal y pérdida de la libido; generando en muchos pacientes un daño a su autoimagen y percepción de su masculinidad, lo que puede afectar las relaciones de pareja y repercute en su autoestima, ya que este daño a su percepción de masculinidad genera en ellos mucha vergüenza e incomodidad.
El apoyo psicológico se centra en:
Entrenamiento en estrategias de enfrentamiento de la enfermedad.
Estrategias para el manejo del estrés y la ansiedad.
Terapia de pareja y de la sexualidad si fuese necesario.
Consejos para enfrentar la enfermedad:
Permitirse sentir las emociones que lo invaden: los sentimientos de miedo, rabia, tristeza, son normales frente al diagnóstico de esta enfermedad y no significan debilidad. El hecho de poder sentirlos es la mejor manera de que vayan perdiendo fuerza y así procesar mejor la enfermedad. Si estos son muy intensos y producen mucho sufrimiento es mejor acudir a un profesional.
No espere a estallar para expresar lo que está sintiendo, es mejor hacerlo cuando las emociones y sentimientos sean de baja intensidad.
Comparta sus sentimientos con personas de su confianza ya que cuando se acumulan suelen provocar más daño.
Recuperar el control de su vida es de vital importancia para mantener una actitud positiva que beneficie su tratamiento y recuperación.
La pareja, la familia y los seres queridos son un gran apoyo para enfrentar la enfermedad.
